La psiquis de una mujer se ve muy afectada cuando ve caer su cabello al peinarse o ducharse, pues perder el cabello significa perder los elementos más bellos de la belleza de una mujer, pero no te preocupes porque la solución es más sencilla de lo que piensas, se trata de dejar algunos malos hábitos. ellos y nota la diferencia:
Peina el cabello desde la raíz hasta las puntas
El propósito de peinar el cabello con un cepillo o un peine es distribuir los aceites naturales en el cuero cabelludo en el cabello desde la raíz hasta las puntas, pero peinar el cabello desde la raíz hasta las puntas puede dañar el cabello desde la mitad y puntas y aumentar el ritmo de su caída, especialmente si el cabello es claro o débil, por lo que la mejor manera de peinar el cabello es peinarlo desde las puntas hasta la raíz del cabello y el cuero cabelludo, teniendo cuidado de usar el ancho peine en lugar del peine de dientes estrechos.
Lavar el cabello a diario
Lavar el cabello a diario es uno de los peores hábitos, lo que conlleva a su debilitamiento y pérdida frecuente, pues el lavado frecuente del cabello conlleva a privar al cabello de los aceites naturales que lo protegen del quiebre y la caída, por lo que es mejor lavar el cabello una o dos veces. dos veces por semana, cuidando de realizar un baño de aceite capilar una vez por semana.
secando el cabello
Muchas recurren a secarse el cabello con secador inmediatamente después del baño, lo que provoca que el cabello pierda su suavidad y brillo natural y se caiga.La mejor manera de secarlo después del baño es secarlo suavemente con una toalla y luego dejarlo actuar. para secar al aire Baja temperatura, sin uso diario.
Exponer el cabello a altas temperaturas
Una de las cosas que más debilitan el cabello y provocan un aumento de su caída es exponerlo a altas temperaturas, como ocurre cuando se alisa el cabello con plancha o secador eléctrico Baños de crema y aceites naturales para sustituir los aceites que el cabello pierde como consecuencia de la exposición al calor.
Desnutrición
El cabello es un organismo vivo, crece y se ve afectado por factores externos como el calor y el aire, así como por factores internos como el mal estado psicológico y la desnutrición, así que asegúrate de brindarle la nutrición necesaria a tu cabello, mediante el consumo de alimentos ricos en vitamina C, hierro, zinc y ácido fólico.